Guía para saber qué hacer y qué ver en Marrakech

Con más de un millón y medio de habitantes, Marrakech es una de las ciudades más importantes de Marruecos. Su nombre está invariablemente asociado a su tradicional mercado callejero, el más grande del mundo, en la plaza Jamma el Fna. Quien visite los pasillos de ese fantástico mercado, ubicado junto a la mezquita Kutubia, una de las más importantes del culto islámico, se sentirá en una película de Indiana Jones, rodeado de músicos, artesanos, vendedores de comida y encantadores de serpientes. Entre los atractivos de Marrakech destacan: las Tumbas Saadíes, el Zoco, el Palacio de la Bahía y la Medersa Ben Youssef. Quienes lleguen a estas latitudes no puede perderse un paseo por las dunas lunares del mítico Desierto del Sahara.

No te pierdas visitar los mejores lugares que ver en Marrakech

Plaza Jamaa el Fna

Plaza Jamaa el Fna

La plaza Jamaa el Fna es un sitio emblemático que ver en Marrakech, un centro neurálgico gobernado por el mercado callejero más grande del planeta. Todo aquel que visite esta ciudad debe pasar al menos unas horas por día en este lugar, solamente perderse entre los puestos de artesanías mientras las cobras emergen de sus vasijas, encantadas por las melodías de las flautas. Entre acróbatas, músicos y domadores de monos, se cuela el olor de los puestitos de comida marroquí, que invade el aire con sabores especiados. Se recomienda visitar el mercado al atardecer, mientras el mercado se va iluminando lentamente al ritmo de la música y los alimentos empiezan a cocinarse en el fuego.

El Zoco

El zoco

Otro de los lugares que ver en Marrakech se encuentra al norte de la plaza de Jamaa el Fna, es donde se despliega el Zoco, un conjunto laberíntico de calles repletas de puestos de venta, en donde la única ley es el regateo. Todo se puede comprar en este sitio: ropa, cosméticos, lanas secadas al sol, alfombras, juegos de té, babuchas, especias y un abanico de productos tradicionales. En el Zoco los gremios tienen zonas específicas y se agrupan por especialidad: los cesteros, los ferreteros o los tintoreros, entre otros.

Se recomienda no comprar un tour para visitar el Zoco; al igual que en el caso del mercado de Jamaa el Fnaa, lo que más conviene es recorrer los puestos en soledad para descubrir ofertas y regatear por ellas. Es toda una experiencia discutir acaloradamente los precios con los vendedores locales; en cierto modo, es la mejor forma de impregnarse de las costumbres de Marrakech. Sólo vale recordar que el Zoco cierra los viernes a la mañana.

Tumbas Saadíes

Tumbas Saadíes

Junto a la Mezquita Kasbah se encuentran las Tumbas Saadíes, un sitio imprescindible que ver en Marrakech. Se trata de más de 100 tumbas de la Dinastía Saadí, que datan del siglo XVI. El gran atractivo aquí es el mausoleo la Sala de las Doce Columnas, con una decoración increíble a base de columnas de mármol italiano y oro macizo. También destacan la Sala de Mirhab y la Sala de los Tres Nichos. En el mausoleo principal descansan los restos del sultán Ahmad al-Mansur junto a su descendencia. En los jardines del lugar se encuentran las tumbas de guerreros y sirvientes.

Palacio de la Bahía

palacio de la bahía

Ubicado al norte del barrio judío -a menos de media hora de caminata desde el mercado de Jamaa el Fna- se ubica uno de los palacios más espectaculares que ver en Marrakech, el Palacio de la Bahía, construido a fines del siglo XIX en un gigantesco espacio de ocho hectáreas. Además de los hermosos jardines y edificios, se recomienda visitar el harén, en donde las habitaciones de las concubinas (el sultán Abu Bou Ahmed tenía cuatro esposas y 24 concubinas) circundan un estanque.

Una de las curiosidades es que las habitaciones se encuentran despojadas de objetos, ya que, al morir el gran visir, sus mujeres se llevaron toda la decoración. Por eso lo mejor es mirar para arriba y deleitarse con los fantásticos techos ornamentados. Otro de los palacios a visitar es el Palacio Dar el Bacha. Esta fue la residencia de Thami el Glaoui, pachá de Marrakech en 1912, quien a mediados del siglo pasado recibió en su morada a huéspedes como Winston Churchill y Franklin D. Roosevelt.

Medersa Ben Youssef

Medersa Ben Youssef

La Medersa Ben Youssef es la escuela musulmana más grande de Marruecos (se le dice medersa a un colegio dedicado a estudios religiosos). Es uno de los grandes atractivos que ver en Marrakech. Fue mandada a construir por el sultán Abdallah al-Ghalib y se concluyó en 1565. Hasta 1960 recibía a más de 800 estudiantes en sus 130 aulas. Actualmente es un sitio precioso para descubrir, con muros tapizados de azulejos y un patio central impresionante, en el que cuelga una gran lámpara de hierro.

Ciudad vieja y ciudad nueva

Al igual que otras urbes imperiales marroquíes, Marrakech tiene una ciudad vieja -la gran Medina– y una nueva -la «ville nouvelle»-, más allá de las murallas, que fue edificada por los franceses durante la dominación colonial. Tanto la vieja como la nueva se rigen por normas administrativas diferentes, pero en ambas rige una misma regla: la fachada de los edificios debe ser de color rojo-ocre, color de la tierra autóctona, y por eso se dice que Marrakech es la ciudad roja.

En la ciudad nueva los barrios principales son Hivernage y Guéliz, y la avenida principal, Avenue Mohammed V, un camino repleto de árboles que termina justo frente a una de las puertas de la ciudad vieja.

Mezquita Kutubia

Mezquita Kutubia

La Mezquita Kutubia o Koutoubia es una de las más grandes de todo el mundo árabe y se reconoce a lo lejos por su esbelta torre de casi 70 metros, de piedra de arenisca, en una tonalidad rosada que armoniza con la luz del sol que la convierte en uno de los lugares más bonitos que ver en Marrakech. Aunque el ingreso a la mezquita está prohibido a los no musulmanes, es muy interesante apreciarla desde el exterior, en una zona de bonitos jardines. Este recinto se empezó a construir en el año 1141 por orden del califa almohade Abd al Mu-mim.

Jardines Majorelle

Jardines Majorelle

A media hora a pie desde el centro de la ciudad se encuentran los Jardines Majorelle, el espacio verde más exuberante que ver en Marakech, poblado por plantas exóticas de distintas partes del planeta, además de lagos y fuentes. Este increíble y pacífico jardín botánico, ideal para desconectarse de la ciudad, fue diseñado por el pintor francés Jacques Majorelle en 1924. Actualmente, pertenece al mandamás de la moda Yves Saint Laurent.

Museo de Marrakech

Otro de los sitios que ver en Marrakech es el Museo de Marrakech, funciona en un palacio de fines del siglo XIX, en los tiempos del sultán Moulay Abdelaziz. Se exponen valiosas colecciones de armas, cerámicas y alfombras. Una de las grandes joyas del lugar es una gigantesca lámpara, de estilo andalusí, que cuelga en el patio del museo. Es un lugar fundamental para impregnarse de la cultura, el arte y los usos y costumbres marroquís.

Excursión por el desierto

desierto del Sahara

Todo el mundo ha fantaseado alguna vez con dejar su huella en el gran Desierto del Sahara. Desde Marrakech es posible contratar un tour para hacer una excursión por el día en 4×4 (algunas agencias ofrecen acampar en las dunas bajo las estrellas). Se puede acceder al desierto desde dos pequeñas ciudades: Zagora y Merzouga, esta última ubicada a 500 kilómetros de Marrakech.

Guía turística con los mejores lugares que ver en Marrakech

  • Plaza Jamaa el Fna
  • El Zoco
  • Tumbas Saadíes
  • Palacio de la Bahia
  • Medersa Ben Youssef
  • Mezquita Kutubía
  • Jardines Majorelle
  • Museo de Marrakech
  • Excursión por el desierto