mejor época para viajar a Roma

¿Cuál es la mejor época para viajar a Roma?

Roma es una de las ciudades más encantadoras del planeta, capaz de sintetizar 3.000 años de arquitectura, arte y cultura, en donde las ruinas del Foro Romano, que evocan el poder del antiguo imperio, conviven con la romántica Fontana Di Trevi y la Basílica de San Pedro, en el Vaticano. Al ser una de las capitales europeas más visitadas por el turismo mundial, el flujo de visitantes nunca cesa realmente en sus calles, ya sea en los barcitos soñados de Piazza Navona o en los magníficos museos y monumentos. Pero, si se quiere evitar el frío de enero y febrero, y los calores de julio y agosto, la mejor época para visitar Roma es en los meses de abril, mayo y septiembre, cuando las temperaturas son suaves y no se registran grandes lluvias.

No es tarea fácil describir a una ciudad como Roma. Caminarla es descubrir, en cada rincón, la presencia de una historia apasionante, que late en el monumental Coliseo, el Foro Romano, la Piazza Spagna, el Palazzo Venezia, el Panteón y cientos de hitos que emergen de sus calles angostas. La llamada «ciudad eterna» se erige sobre siete colinas (Capitolino, Celio, Esquino, Palatino, Viminal, Quirinal y Aventino) y en ella viven cerca de 3 millones de personas. Es la capital de la región del Lazio y también de Italia, y cada año recibe a unos 30 millones de turistas de los cinco continentes. Como epicentro del Imperio Romano, logró extender su poderío sobre la cuenca mediterránea, gran parte de Europa, África del Norte y Oriente próximo. Llegó a ser la primera gran metrópoli en la historia humana y no sólo gobernó el destino de millones de personas sino que también impuso su lengua, literatura, arquitectura, filosofía, religión, derecho, gastronomía y cultura durante los siglos que vinieron. En sus calles se da una concentración de bienes históricos y arquitectónicos que no existe en ninguna otra ciudad del mundo. Roma es, además, el corazón mismo de la religión católica. La ciudad contiene en su interior a una entidad estatal autónoma: la Ciudad del Vaticano, que corona su majestuosidad en la cúpula de la basílica de San Pedro. La historia cuenta que Roma fue fundada por Rómulo y Remo, los gemelos amamantados por una loba, llamada Luperca, en el año 753 AC.

¿Cómo es el clima de Roma?

El clima de Roma es mediterráneo, con veranos calurosos e inviernos que por lo general son fríos y lluviosos; la primavera y el otoño, en tanto, son especialmente suaves. Si se analiza cada estación del año, el invierno registra temperaturas mínimas que rondan los 5 grados, con enero y febrero como los meses más fríos, en los que llega a helar por la noche. El verano, en cambio, es la época de mayor sol del año, aunque el calor puede resultar intenso y agobiante a causa de la gran humedad, sobre todo en julio y agosto. Es el momento en que los romanos se sientan a tomar un aperitivo para disfrutar el final del día, en los cientos de bares y pubs que salpican la ciudad. También la primavera presenta un clima agradable, con cielos despejados y temperaturas cercanas a los 15 grados en abril, aunque pueden trepar hasta 25 grados en mayo. En estos dos meses, las lluvias son escasas. Finalmente, en otoño siguen las temperaturas suaves, apenas por encima de los 15 grados, pero, en la cuenta regresiva al invierno, cada día empieza a hacer más frío y a llover más.

¿Cuál es la mejor época para viajar a Roma? (Temporada alta)

La temporada alta romana se da en los meses de verano, fundamentalmente en julio y agosto. Es el momento en que las calles, plazas y monumentos se ven abarrotados de gente y se forman largas filas para conocer los principales atractivos de la ciudad. La mejor época para viajar a Roma es durante los meses de abril y mayo, antes del verano; y en septiembre y octubre, antes del invierno. En esos meses de primavera y otoño, respectivamente, el clima se presenta suave y estable: no hace ni demasiado frío ni demasiado calor y el flujo de turistas no es tan alocado como a mitad de año. Son períodos ideales para conocer algunas de las maravillas romanas. A saber: subir los 135 peldaños de la Piazza Spagna, una de las más populares de la ciudad, rodeada de tiendas y restaurantes sobre la Vía de Condotti; viajar al pasado entrando al Coliseo, una de las siete maravillas del mundo, conocido en la antigüedad como Anfiteatro Flavio (construido entre 72 y 80 DC), en donde se libraban combates épicos con gladiadores y animales salvajes; fascinarse con el Panteón de Agripa, construido en tiempos del Emperador Adriano (117-138), el edificio mejor conservado del Imperio Romano; tomar un café en la Piazza Navona, la más linda de Roma; conocer el Trastevere, uno de los barrios más trendy de la ciudad, con sus tiendas de artesanos y sus bares bohemios; emocionarse en la Basílica de San Pedro, el templo más grande e imponente del catolicismo, en el Vaticano; sorprenderse con las ruinas del Foro Romano, en el que perduran restos de templos y edificios con más de 2.000 años de historia. Finalmente, las noches de primavera o de otoño son fantásticas para realizar una visita nocturna al Castillo de Sant’ Angelo, en las orillas del río Tíber, construido en homenaje al emperador Adriano.

¿Cuál es la mejor época para viajar a Roma ahorrando dinero?

Tanto los operadores turísticos como los foros de viajeros coinciden en que la época para viajar a Roma más cara es durante los meses de julio y agosto, y a fin de año, cuando cientos de miles de turistas llegan a la ciudad eterna a pasar Navidad y Año Nuevo. Ninguna temporada es realmente «baja» en Roma, porque, como dijimos, el turismo colapsa la ciudad casi todo el año. Sin embargo, el otoño es un período en el que las aglomeraciones de gente, al igual que los precios de hoteles y vuelos, bajan sensiblemente. En septiembre y hasta mediados de octubre, en la previa de las lluvias invernales, el clima sigue siendo soleado, perfecto para caminar por Roma hasta la noche, cada vez más fresca a medida que se acerca noviembre. La primavera también es una buena época para viajar a Roma ahorrando dinero: en los meses de abril y mayo empieza a hacer cada vez más calor, la capital florece y los precios todavía son bajos si se los compara con la remontada que tendrán cuando se acerque julio.

En resumen, si lo que quieres evitar grandes aglomeraciones de gente, temperaturas altas y ahorrar algo de dinero, la mejor época para viajar a Roma son en los meses de Abril, Mayo, Septiembre y Octubre.

¿Qué necesitas tener y saber antes de viajar a Roma?

  • Equipaje: más allá de la ropa que se elija según la estación del año, quienes visiten Roma deben pensar primero en llevar un calzado cómodo. Roma es, ante todo, una ciudad que se disfruta caminando. Sólo hay que recordar que, para visitar las iglesias de la ciudad o el Vaticano, las rodillas y los hombros deben estar cubiertos.
  • Tarjetas turísticas: en Roma existen dos tarjetas turísticas que permiten ahorrar dinero en las entradas a museos. Una se llama Roma Pass y la otra Omnia Card. Ambas ofrecen accesos prioritarios y descuentos en las entradas a los principales museos y monumentos, así como abonos con acceso ilimitado al transporte público.
  • Hoteles: para acceder a buenas tarifas de hoteles se debe reservar con mucha anticipación. En Roma nunca hay que dejar para último momento la elección del alojamiento.
  • Vaticano: debe saber que el último domingo de cada mes, los museos son gratuitos en el Vaticano. Eso sí, para entrar a la Capilla Sixtina habrá que hacer cola desde muy temprano. La mayoría de los museos cierran los lunes.
  • Agua: en Roma existen bebederos y fuentes de agua perfectamente potable. Se aconseja llevar una botella para ir recargando en las paradas. O pagar entre 1 y 2 euros por cada botellita de agua mineral.
  • Mejor a la noche: siempre hay muchísima gente, casi a toda hora, en sitios como la Fontana de Trevi o el Panteón. En cambio, esos lugares son magníficos -y a veces casi desiertos- si se visitan muy tarde a la noche. Será la mejor ocasión para lograr fotos increíbles sin turistas en el cuadro.
  • Seguridad: Roma no es una ciudad peligrosa pero los carteristas se mantienen bastante activos en algunas zonas de la ciudad. En el barrio de Termini, en la central de trenes, hay que prestar especial atención.
  • Comida: para comer barato y rápido siempre habrá una pizza al corte esperando a la vuelta de la esquina. Una porción grande se consigue a 2,5 euros. Te aconsejamos dar una vuelta por las calles no principales de Roma ya que ahí encontrarás verdaderos restaurantes italianos a muy buenos precios.